Categoría
España
Antetítulo
Política 
Título
El PP y Vox invisten a Juanfran Pérez Llorca como nuevo presidente de la Generalitat Valenciana
Subtítulo
El diputado del PP logra la investidura con el respaldo de Vox y asume la presidencia del Consell entre críticas por su alineación ideológica. Llorca asume el cargo tras la dimisión de Carlos Mazón
Autores
ACN

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Francisco Pérez Llorca, el nuevo presidente Generalitat de Valencia
Francisco Pérez Llorca, el nuevo presidente Generalitat de Valencia
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El pleno de investidura celebrado este jueves en las Cortes Valencianas ha convertido a Juanfran Pérez Llorca en el nuevo presidente de la Generalitat Valenciana, tras la dimisión de Carlos Mazón. Para ser investido, contó con el apoyo del Partido Popular y el respaldo decisivo de Vox, cuyos diputados votaron a favor de su candidatura. En total, Pérez Llorca obtuvo 53 votos a favor frente a 45 en contra, emitidos por el bloque formado por PSPV‑PSOE y Compromís.

Durante su discurso de investidura, Pérez Llorca manifestó su disposición a asumir las exigencias de Vox para garantizar su apoyo, centrando su intervención en cuestiones de inmigración y criticando políticas ecológicas como el Pacto Verde Europeo. Asimismo, prometió atender las consecuencias del escándalo de la DANA ocurrido en octubre de 2024 antes de asumir plenamente sus funciones.

La elección de Pérez Llorca busca asegurar la continuidad y estabilidad del ejecutivo autonómico tras la salida de Mazón. El apoyo de Vox resultó decisivo para que la investidura prosperara, dado que sin esos votos adicionales, el PP no habría alcanzado la mayoría necesaria.

No obstante, la decisión ha generado críticas por parte del PSPV‑PSOE y Compromís, que cuestionan la legitimidad de la investidura y acusan al PP de ceder a las demandas de Vox, señalando que el cambio no representa una renovación política sino una continuidad condicionada por la extrema derecha.

El nuevo presidente asumirá ahora la tarea de liderar la Generalitat Valenciana en un contexto político marcado por la necesidad de equilibrar su gobierno con el apoyo externo de Vox, mientras intenta consolidar la confianza en su gestión ante la ciudadanía y los distintos grupos parlamentarios.