Categoría
Costa
Antetítulo
PortAventura
Título
Las entrañas de la nueva atracción de PortAventura: 'Expedición ULUM'
Subtítulo
PortAventura abre en México la primera experiencia de realidad mixta para familias del mundo. Es un viaje asombroso por un cenote, entre dinosaurios, con unas gafas especiales y un mando. El ‘feedback’ de los usuarios la hará cambiar
Autores
Mónica Pérez
Redactora de Costa

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La atracción combina escenarios físicos y entornos digitales de última generación.
La atracción combina escenarios físicos y entornos digitales de última generación.
Artículo

Formas parte del equipo de exploradores Alfa. Estás a punto de sumergirte a gran profundidad en uno de los cenotes –los agujeros naturales que dejan ver aguas subterráneas– de Yucatán, en México. Un grupo de científicos cree haber descubierto restos de dinosaurios y tú acudes a documentar qué hay exactamente allí. Desciendes. Avanzas por el fondo, rodeado de peces de colores que casi puedes atrapar con las manos, envuelto en burbujas, alumbrándote con ayuda de bengalas y una linterna, grabándolo todo. Pero la misión pronto se transforma en un encuentro con criaturas jurásicas vivas.

Así arranca la espectacular Expedición ULUM: El despertar jurásico, la nueva atracción de PortAventura World que abrió ayer en el área de México. «Es la primera experiencia de realidad mixta para familias del mundo», explica Andreu Tobella, director digital de PortAventura. ULUM ha sido desarrollada desde PortAventura Adventure Labs, «la unidad que fue creada hace tres años para hacer que PortAventura lidere el universo de los parques temáticos a nivel de tecnología e innovación».

La propuesta usa gafas especiales –las PICO 4 Ultra Enterprise– que el usuario se pone al entrar con una suerte de mando que, mediante un gatillo, activa un foco para distinguir mejor el recorrido acuático. Hay escenarios físicos y entornos digitales de última generación. «Puedes ver dinosaurios a tamaño real paseándose junto a ti».

«La realidad mixta encaja muy bien con las nuevas generaciones, que piden cosas distintas: personalización, inmersividad, oportunidad de cocrear, experiencias en grupo...», añade Tobella. Y es que uno de los objetivos de la concepción de El despertar jurásico es no aislar al usuario, sino que pueda seguir sintiendo que está con sus acompañantes y compartir la vivencia con ellos. 

Irá evolucionando

Además, el hecho de que la atracción sea «muy software» permite «hacer cambios rápidamente» y «generar nuevas versiones». Por eso, «habrá, a menudo, mejoras en base al feedback de la gente», detalla el director digital. Todo ello comportará «un cambio respecto al histórico estatismo de las atracciones» y es otro paso en la intención de PortAventura de ajustarse a todos los gustos –hasta los más «chill»– y seguir a los visitantes a lo largo de su vida.

Expedición ULUM –el nombre tiene reminiscencias mayas y simboliza la fuerza y el movimiento, elementos clave tanto en el universo jurásico como en la propia historia de la experiencia– se dirige a un público a partir de seis años y puede alojar a tres grupos de seis personas a la vez. Se ofrece en catalán, castellano, inglés y francés y está adaptada para personas con movilidad reducida. Se espera que alrededor de 400 visitantes al día puedan disfrutar de ella. La reserva de turno para acceder se hace mediante la app oficial de Portaventura World, con un código QR in situ. Ayer, primer día de actividad, se alcanzó el lleno.

El trayecto por El despertar jurásico dura entre 12 y 15 minutos y plantea grandes singularidades, como el «olor a cenote» que se podrá percibir. «Estamos muy ilusionados. Ver salir a los niños con una sonrisa es lo que nos da energía a todos para continuar trabajando fuerte», concluye Tobella.

Jordi Centelles, jefe de innovación digital (izquierda); y Andreu Tobella, director digital de PortAventura.
Jordi Centelles, jefe de innovación digital (izquierda); y Andreu Tobella, director digital de PortAventura.