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Nicolas Sarkozy vuelve a enfrentarse a un revés judicial. Apenas dos semanas después de salir de prisión tras cumplir 20 días por otra causa, la Corte de Casación francesa ha desestimado el recurso presentado por sus abogados y ha confirmado de manera definitiva la condena por la financiación ilegal de su campaña presidencial de 2012, conocida como el caso Bygmalion.
La sentencia ratifica la pena de un año de prisión, con seis meses condicionales, impuesta en segunda instancia en febrero de 2024. No obstante, los jueces han permitido que Sarkozy cumpla la condena mediante brazalete electrónico, lo que evita su reingreso en prisión. El exmandatario, presidente de Francia entre 2007 y 2012, se convierte así en uno de los primeros expresidentes de la Quinta República en ser condenado a usar un dispositivo de este tipo.
La Corte de Casación concluyó que Sarkozy no solo superó el límite legal de gasto permitido en una campaña presidencial, sino que también utilizó facturas falsas para camuflar la ilegalidad. Su equipo gastó cerca de 43 millones de euros, casi el doble del tope legal de 22,5 millones. La trama recibió el nombre de la empresa de comunicación implicada, Bygmalion. A pesar del derroche, Sarkozy perdió frente al socialista François Hollande.
En esta causa, también fueron condenados de manera definitiva el director de campaña Guillaume Lambert y dos responsables del partido, Éric Cesari y Pierre Chassat. A lo largo del proceso, Sarkozy ha negado cualquier responsabilidad penal, calificando los hechos de "mentiras" y "fábula", pero sus declaraciones han sido desmentidas por el fallo judicial.
El contexto mediático de esta condena quedó en parte eclipsado por el reciente encarcelamiento de Sarkozy entre el 21 de octubre y el 10 de noviembre, relacionado con otra investigación sobre la financiación de su campaña presidencial de 2007 con fondos procedentes de la dictadura libia de Muamar Gadafi. El expresidente publicará un libro el 11 de diciembre relatando su experiencia en la prisión parisina de la Santé.
Por otro lado, el Tribunal de Apelación retomará en marzo de 2026 el juicio sobre la trama libia, en la que Sarkozy fue declarado culpable de asociación de malhechores. Tanto la defensa como la Fiscalía presentaron recursos contra la sentencia de septiembre pasado, pero el precedente del caso Bygmalion sugiere que el proceso podría terminar nuevamente en la Corte de Casación, salvo que se produzca una sentencia absolutoria que limpie parcialmente su imagen.