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La Diputació de Tarragona puede presumir de tener unas cuentas expansivas y saneadas. Prueba de ello es que en una década ha incrementado su presupuesto en 100 millones de euros y lo ha doblado en solo 14 años.

Así lo destacó ayer la presidenta del ente supracomarcal, Noemí Llauradó (ERC), durante la presentación de las cuentas del 2026, que ascienden a un montante global de 237,5 millones de euros, un 6,8% más que este 2025.

Especialmente significativo es el crecimiento de los últimos años, que ha llevado a los gestores del Passeig de Sant Antoni a pasar de los 180 millones del 2022 a los 237,5 del próximo año, en el que será el presupuesto más elevado de la historia del ente provincial. En resumen: un 31% de incremento tras la covid, en una cifra que se dispara hasta casi el 100% respecto a los 118 millones del 2012.

De 33,9 a 0 desde 2020

Especialmente significativo es que el crecimiento de los recursos económicos se ha incrementado de la misma forma que se ha reducido la deuda bancaria. Así, según datos aportados por la propia Diputació, mientras que en 2017 el organismo arrastraba un pasivo con las entidades financieras de 33,9 millones de euros, este se liquidó en 2020, antes de la pandemia. Desde entonces, y a diferencia de lo que sucede en muchos consistorios, la administración provincial no debe nada a los bancos.

En las cuentas del 2026 se incluyen 14,5 millones para el mantenimiento y mejora de la red viaria de la Diputació, y 2,4 para optimizar la gestión del ciclo del agua. También se destinará un millón para la ampliación del centro de educación especial Alba de Reus, así como 400.000 para el futuro auditorio de la capital del Baix Camp.

El Pla ImpulsDipta, con 47,9 millones, será el proyecto más destacado del presupuesto, que en marzo experimentará cambios con la incorporación del sobrante de 2025. De momento, también se destinan dos millones en ayudas para resolver situaciones provocadas por fenómenos meteorológicos extremos o incendios.

La presidenta Noemí Llauradó, que con este sumará su séptimo presupuesto como presidenta, destaca que las cifras «reflejan el compromiso con el mundo local». Por su parte, el diputado de Hisenda, Fran Morancho (PSC), calificó el plan económico como de «riguroso y responsable», mientras que Marc Rovira (Junts) valoró la «mà estesa» para llegar a acuerdos.

Las cuentas se aprobarán en el pleno de este viernes con el aval de PSC, ERC, Junts y PP. Lejos de las tensiones de la Plaça de la Font o del Parlament de Catalunya, en la Diputació volverá a imperar, por enésima ocasión, la pax de Sant Antoni.