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La factura de las catástrofes naturales registradas en España en 2024 ascendió a 11.330 millones de euros, 6.880 millones más que en 2023, cuando el coste fue de 4.450 millones. La cifra se más que duplicó por el impacto de la dana de octubre, que afectó especialmente al sureste del país.
Según los cálculos del Barómetro de Catástrofes 2024, presentado este miércoles en Madrid durante el X Simposium del Observatorio de Catástrofes de la Asociación Clúster Catástrofes, el coste asegurado alcanzó los 6.335 millones de euros; los daños no asegurados, 2.450 millones; los costes imputados a los first responders, 1.231 millones; y el impacto sobre el PIB, 1.314 millones.
El coste asegurado se disparó desde los 2.449 millones registrados en 2023, más que duplicando la cifra del año anterior. La dana del 29 de octubre de 2024, con un coste asegurado de 5.260 millones, concentró cerca del 83 % del total anual. Este episodio elevó un 160 % la factura asegurada respecto a 2023 y aumentó un 34,3 % el coste medio anual de la última década, que pasó de 1.551 a 2.080 millones.
Los daños asegurados derivados del resto de catástrofes, excluida la dana, sumaron 1.075 millones de euros, distribuidos entre el Consorcio de Compensación de Seguros (173 millones), Agroseguro (659 millones) y el seguro privado (242 millones).
Los daños no asegurados totalizaron 3.287 millones de euros, de los cuales 2.451 millones corresponden a daños directos provocados por los distintos desastres naturales. Las actuaciones de los first responders —Protección Civil, UME y Cruz Roja— y de Tragsa supusieron un coste de 1.231 millones, frente a los 124 millones de 2023, casi diez veces más. El impacto total sobre el PIB nacional fue de 1.314 millones de euros.
El Barómetro destaca que los daños derivados de la aseguración de familias y empresas rozaron los 3.290 millones en 2024, lo que implica que el sector asegurador solo cubrió dos tercios de los costes generados por las catástrofes.
El presidente del Observatorio de Catástrofes de la Asociación Clúster Catástrofes, Pedro Tomey, afirmó que 2024 ha sido el año “más catastrófico” no solo desde que se elaboran estos barómetros (2016-2024), sino también desde que el Consorcio de Compensación de Seguros inició sus registros de riesgos extraordinarios en 1954.
El Consorcio asumió la mayor parte del impacto de la dana con 4.954 millones en indemnizaciones, apoyado por aseguradoras privadas y sus equipos periciales. Agroseguro abonó 53 millones y las aseguradoras privadas, representadas por Unespa, 192 millones. A ello se suman 1.135 millones por siniestros no vinculados a la dana y abonados por el Consorcio, Agroseguro y aseguradoras privadas.
En 2024, el coste medio por habitante fue de 117 euros, frente a los 28 euros de 2023, cuatro veces más, una cifra muy condicionada por la Comunidad Valenciana, donde los daños per cápita llegaron a 990 euros.
Además de los daños asegurados, los first responders y Tragsa afrontaron 100 millones en gastos de emergencia, a los que se añaden 1.130 millones recogidos inicialmente en los Presupuestos Generales del Estado para la reconstrucción y reactivación socioeconómica de las zonas afectadas.