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Vecinos de las urbanizaciones alrededor del Club de Golf Bonmont, en Mont-roig del Camp, denuncian una «plaga» de jabalíes con «situaciones de riesgo» que vienen dándose desde hace años y aseguran haber presentado ante el Ayuntamiento «decenas de denuncias» sin que se haya alcanzado ninguna solución. «La situación, que se ha agravado en los últimos meses, provoca destrozos en propiedades privadas y espacios comunes, además de generar un evidente riesgo para la seguridad y la salud pública», indica el presidente de la asociación recientemente creada Veïns de Bonmont i Terres Altes, Manel Gil, en un comunicado.

La entidad lamenta que, en este tiempo, «no se ha puesto en marcha ninguna media efectiva» sino que el gobierno local «se ha limitado a considerar el problema como un asunto privado». Y atribuye al Ayuntamiento la responsabilidad en la protección de las personas frente a la fauna.

Veïns de Bonmont i Terres Altes adjunta una instancia, presentada al Ayuntamiento el 22 de octubre, en la que se advierte de que «la urbanización Robles y Almendros lleva sufriendo de manera reiterada y creciente la presencia de mandas de jabalíes que bajan a la zona residencial provocando destrozos en jardines y zonas verdes comunitarias, riesgo para la seguridad de las personas y vehículos y pérdidas económicas». El mismo documento recoge, pese al esfuerzo de los vecinos –con vallados, luces disuasorias y otros sistemas–, «el problema persiste y se agrava». Y solicita al Ayuntamiento «medidas urgentes» como campañas de control o refuerzo de la limpieza.

En la respuesta a la instancia, el gobierno señala que la comunidad de propietarios en cuestión es «zona privada, por lo cual las actuaciones que se lleven a cabo han de ser por parte de la misma». A su vez, el Ayuntamiento aporta una serie de recomendaciones a los vecinos: evitar plantas bulbosas, reducir el riego de césped en verano, dejar la basura dentro de los contenedores o evitar prácticas de alimentación a los jabalíes.

Gil subraya que el problema «no es solo estético ni económico» y que «la inseguridad que provoca la presencia de jabalíes en zonas habitadas genera alarma entre los vecinos, sobre todo en los que tienen niños pequeños». «No podemos seguir jugando al escondite con los jabalíes mientras el Ayuntamiento se lava las manos», añade. La actualidad del brote de peste porcina africana en Catalunya, pese a no tener repercusión directa para la salud del ser humano y que Mont-roig no se encuentra entre las zonas afectadas, les ha llevado ahora a hacer pública su reclamación.

Las comunidades exigen una intervención inmediata que incluya «coordinación con los agentes rurales, Mossos d’Esquadra, Seprona y técnicos de sanidad animal», medidas de control y prevención y una evaluación de las zonas donde se concentra esta fauna. Quieren también medidas de prevención y bioseguridad y un plan de contingencia. Los residentes no descartan emprender acciones colectivas o elevar una queja formal a la Generalitat. 

Vigilancia activa

Consultado por este rotativo, el Ayuntamiento expone que ha activado actuaciones para gestionar la presencia de jabalíes en la urbanización Bonmont, «a raíz del incremento de avistamientos y de la inquietud generada entre el vecindario». Recuerda que estas zonas se encuentran en un entorno natural que «a veces, tiene aspectos no deseados». Y detalla que, pese a no ser foco de peste porcina africana, mantiene la vigilancia con la Generalitat. Añade que, en este punto, las medidas que se pueden tomar son: recomendaciones a la ciudadanía  y batidas de caza.  

El Ayuntamiento apela a la colaboración vecinal para reducir los factores que atraen los jabalíes y garantizar una convivencia segura entre las personas y la fauna del municipio. Se insta los residentes a seguir las recomendaciones oficiales y comunicar cualquier incidencia mediante los canales municipales.