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Hace 25 años, en una madrugada australiana llena de expectación, Tarragona vivió uno de los momentos más decisivos de su historia reciente. Mientras la ciudad dormía pero muchos permanecían en vilo, pendientes de la resolución final, la Unesco confirmaba la inscripción de Tarraco en la lista de Patrimonio de la Humanidad, reconociendo el valor excepcional de sus restos romanos y su relevancia como capital del Mundo Clásico en Catalunya. Este reconocimiento supuso un cambio profundo en la valoración de un legado que durante mucho tiempo fue considerado solo desde la perspectiva del esfuerzo y el gasto. Desde entonces, Tarraco ha pasado a ser un activo cultural y económico, un referente internacional que invita a preservar, proteger y compartir su historia milenaria. A lo largo de este cuarto de siglo, se han logrado importantes avances que permiten consolidar el patrimonio romano de la ciudad. Sin embargo, también quedan retos por delante, en especial en la coordinación institucional, la continuidad de proyectos y la construcción de un relato integral que conecte cada espacio y monumento con la vida contemporánea de Tarragona.

Hoy, con el impulso de iniciativas como la creación del Consorci del Patrimoni Romà de Tarraco y la inversión de fondos europeos, se abre una etapa prometedora. Estas acciones reforzarán la conservación, la musealización y la accesibilidad, y contribuirán a que Tarragona sea no solo un conjunto arqueológico de relevancia, sino una ciudad viva que respira historia en cada rincón. Celebrar estos 25 años es reconocer la importancia del compromiso colectivo para salvaguardar un legado que es de todos. Tarraco es símbolo de identidad, cultura y memoria, y su protección y difusión deben inspirar el desarrollo de proyectos que sean sostenibles y con visión de futuro. La declaración en aquella madrugada australiana fue solo el comienzo. Hoy, Tarraco sigue escribiendo su historia con orgullo y determinación. Este aniversario es también una llamada a toda la comunidad para involucrarse en la preservación y promoción de este invaluable patrimonio. Este aniversario invita a unir esfuerzos para mantener viva la historia de Tarraco.