Categoría
Sucesos
Título
Los helicópteros de Trànsit ‘cazarán’ los fines de semana en la AP-7 a su paso por Tarragona
Subtítulo
El Departament d'Interior activarà la vigilancia intensiva en el tramo del Ebre, desde Calafat hasta Amposta, cuando esté la nueva señalización. Ésta depende de Carreteras del Estado
Autores
Jordi Cabré
Periodista

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Hace diez días, el 20 de noviembre, la consellera de Interior y Seguridad Pública, Núria Parlon, presentó una batería de medidas para combatir la siniestralidad en la AP-7, especialmente en el tramo sur de Tarragona, con dos carriles por sentido de la marcha, y para regularizar la movilidad de mercancías, que se ha incrementado en esta vía rápida tras la liberación de los peajes.

La previsión anunciada por la consellera y el director del Servei Català de Trànsit, Ramon Lamiel, es activar las medidas antes de que termine el año, aunque todavía no se ha concretado la fecha. Esto se debe a que, antes de poder aplicar la nueva normativa en el tramo entre Calafat y Amposta en sentido sur, es necesario contar con la señalización correspondiente en la autopista.

Ramon Lamiel ha explicado que la señalización es responsabilidad de su titular, el Estado. Por tanto, es el Departamento de Carreteras quien debe instalar los carteles con las nuevas velocidades máximas: 100 km/h para turismos, motos y autobuses, y 80 km/h para camiones.

Paralelamente, este mismo departamento, que pertenece al Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, debe acondicionar algunos puntos de la vía para la colocación de los radares de remolque, mediante pequeños aparcamientos donde se puedan situar los dispositivos.

Una vez realizada esta actuación por Carreteras del Estado, el resto del trabajo queda bajo competencia del Govern, a través del Servei Català de Trànsit.

Serán los Mossos d’Esquadra del área de Trànsit quienes velarán por el cumplimiento de estas nuevas normas, mediante controles aleatorios, radares móviles (las llamadas cajas naranjas) y radares de remolque.

A estas medidas se sumarán los helicópteros de Trànsit, que volarán hasta Tarragona para vigilar desde el aire el tráfico en este tramo de la AP-7. La idea es que su apoyo se concentre principalmente en los fines de semana, aunque también se prevé su presencia algunos días entre semana.

La autonomía de vuelo obliga a que, para el retorno a la base de Barcelona, los helicópteros realicen una parada en el aeropuerto de Reus para repostar.

¿Y los drones?

Ramon Lamiel ha explicado que el Servei Català de Trànsit no tiene drones para la vigilancia del tráfico y que la información que salió días antes de la rueda de prensa fue una confusión. Los únicos medios aéreos son los dos helicópteros que tiene el Govern.