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Como las montañas de la locura de Lovecraft dibujadas por el minucioso trazo de Gou Tanabe, artista invitado y al que se le dedica una exposición monográfica, el Manga Barcelona es un territorio siempre más extenso, creciente y diverso. Quizá aún más que en ediciones anteriores, esta trigésimo primera cita constituye el salto definitivo desde un evento centrado en la industria del cómic japonés a uno de los encuentros más influyentes de la cultura pop en España. La convivencia entre manga, anime, gastronomía, artes escénicas, videojuegos, nuevas tecnologías y fenómenos globales del fandom contemporáneo se traduce en la presencia de artistas como la actriz y cantante Aina the End, ex miembro del grupo idol Bish, el virtuoso del koto Kotomen (Yoshiaki Okawa), las bandas Tsukune y Kotoband, la cantante Mai Yamane y la autora de bandas sonoras Yoko Kanno, cineastas como Shinichiro Watanabe, el creador de Cowboy Bebop (1998), productores como Tsuyoshi Yamakawa, artífice de Detective Conan, y una pléyade de figuras señeras del cosplay que comparece junto a numerosas autoras de manga y anime de diferentes generaciones.

A la par que las editoriales abren sus catálogos a una mezcla cada vez más equilibrada entre grandes lanzamientos comerciales y obras de autor, Manga Barcelona programa mesas redondas dedicadas a la traducción, la restauración de clásicos y el trabajo editorial en la era digital. Todo ello contribuye a un evento que no solo comercializa novedades, sino que fomenta una reflexión sobre cómo leemos, traducimos y archivamos manga en un contexto globalizado. Uno de los aspectos centrales de la edición de 2025 es la consolidación de espacios dedicados al cosplay y a la performance. Las pasarelas y concursos, cada vez más profesionales, conviven con zonas libres abiertos a la energía espontánea del público. Cosplayers como Glin, Milou & Thaly o artistas como Kimono Dance Player han demostrado que tanto el cosplay como la reivindicación de la iconografía tradicional japonesa a través del pop constituyen modos de narración encarnada, gestos capaces de conectar generaciones y estilos sin jerarquías evidentes.

También exposiciones como la dedicada a Gekidan Shinkansen, una de las compañías de teatro más importantes del Japón, junto con GEKIxCINE, que lleva a la pantalla sus dinámicas producciones escénicas con un toque cinematográfico, exponen el espacio de intersección entre cultura japonesa, tecnología y nuevos modos de creación. Talleres de ilustración digital, demostraciones de inteligencia artificial aplicada al dibujo y espacios híbridos donde conviven arte tradicional y procesos algorítmicos ofrecen, además, una cartografía de nuevas prácticas creativas en torno a la centralidad del manga. Lejos de presentar la tecnología como amenaza, Manga Barcelona la integra de manera crítica como herramienta, generando debates sobre derechos de autor, propiedad de la imagen y las posibilidades éticas de los modelos generativos en el ámbito artístico. En un momento en que el ecosistema creativo se replantea sus métodos de producción, Manga Barcelona se convierte en un observatorio privilegiado de estas transformaciones, incluso la que concierne a la gastronomía.

La gastronomía japonesa, siempre presente, se presenta a través de un salto cualitativo: no solo se ofrecen degustaciones, sino también talleres y charlas que contextualizan históricamente platos y técnicas. Esta dimensión culinaria contribuye a afirmar el salón como una celebración de la cultura japonesa en su conjunto, más allá de las ficciones y las pantallas. Con todo, lo que define a Manga de Barcelona 2025 no es únicamente la programación, sino la intensidad de una comunidad diversa en edades, procedencias y espacios imaginarios. Quizá, lo que se desprende de las tres décadas de lo que se denominó originariamente el Salón del Manga y su cristalización en esta nueva entrega es algo tan inusual en el panorama audiovisual contemporáneo como la posibilidad de trascender el presente para pensar, a través de la infinita diversidad de géneros y medios expresivos que rodean al manga, otros futuros posibles.