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Cerca de 4.000 bienes inmuebles confiscados por el franquismo después de la Guerra Civil forman parte de una extensa base de datos que ha creado el grupo de investigación ISOCAC (Historia, Sociedad, Política y Cultura desde Catalunya al Mundo) del Departamento de Historia e Historia del Arte de la UUniversitat Rovira i Virgili (URV). 

El trabajo, inédito por su exhaustividad y que próximamente será abierto y consultable, forma parte del proyecto Bienes inmuebles expoliados, incautados y confiscados bajo la dictadura franquista en España (1936-1950), que tiene en Ginés Puente y Montserrat Duch los investigadores principales y que está financiado por el Ministerio de Política Territorial y Memoria Democrática, dentro de la partida de subvenciones destinadas a actividades relacionadas con la recuperación de la memoria democrática y de las víctimas de la Guerra Civil y la dictadura.

La base de datos, en la cual han trabajado los investigadores becados de ISOCAC Sergio de Andrés y Alba Gassó, se ha nutrido sobre todo de documentos oficiales como por ejemplo la ley de confiscaciones de 1939 y el libro de actas que el régimen creó entre 1940 y 1950 con los bienes confiscados a las asociaciones, sindicatos y cooperativas que consideraba que tenían un “carácter sindical marxista”, y que mayoritariamente pasaron a la Delegación Nacional de Sindicatos (DNS). También se han consultado otros documentos y se han hecho vaciados bibliográficos de estudios ya existentes.

El resultado de este expolio de edificios, pero también de dinero y otros materiales, supuso, especialmente en el caso de Catalunya, que quedara deshecha la importante red asociativa que se había ido creando y que no se recuperó hasta los años noventa. 

Esta base de datos, además de la importancia histórica que tiene, puede servir de base para posibles reclamaciones, como la demanda que ha interpuesto recientemente el ayuntamiento de Caldes de Montbui contra el estado para el resarcimiento del patrimonio municipal expoliado.

Ginés Puente explica que uno de los puntos fuertes de esta base de datos es que permite hacer filtrajes, de forma que se pueden realizar búsquedas por municipios, por tipología de la confiscación, por los propietarios anteriores, por el destino… 

De hecho, también se han creado mapas por provincias y municipios con las geolocalizaciones de los bienes. “Es una información muy rica, que casi da para hacer trabajos de investigación con cada entrada. Es una gran base de datos de historia local”, asegura Puente.

La base de datos se ha presentado este miércoles en la URV en el marco de las jornadas “El expolio de bienes marxistas durante el franquismo”, organizadas por el grupo de investigación ISOCAC, en qué diferentes expertos han debatido alrededor del contexto político e ideológico de las confiscaciones y de la realidad legal y legislativa, entre otros. han participado Daniel Vallès (UAB), Neus Moran (UOC), Manuel Álvaro Dueñas (*UAM) y Elisabet Córdoba i Laura Flores (Archivos del Estado-Museo del Traje).

A pesar de que el proyecto, que era de un año, acaba ahora, la riqueza de los datos encontrados hará que se alargue y, de hecho, el próximo objetivo es que la base de datos sea consultable, puesto que esta es en parte la razón de la financiación por parte del ministerio.

Además, los investigadores esperan continuar ampliando el documento. Son conscientes que existen muchos más bienes confiscados, puesto que hay muchos casos que no constan en documentos oficiales, un hecho habitual en periodos tan convulsos como el final de la Guerra Civil. Además, intentarán seguir la pista de muchos de estos bienes inmuebles para averiguar a quién pertenecen actualmente.