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Hipotecas un poco más caras, predominio de los tipos fijos y, sobre todo, mayor vinculación para conseguir los mejores intereses. Con los objetivos de 2025 casi finiquitados, los bancos comienzan a preparar ya su estrategia comercial de cara a 2026, en un entorno en el que se prevé que los precios de la vivienda sigan escalando posiciones, con subidas de entre un 5% y un 8% para las compraventas y de entre un 7% y un 10% en los alquileres, según la firma especializada UCI.
La oferta de casas seguirá siendo, en todo caso, insuficiente para una demanda cada vez mayor por la creación de nuevos hogares. Y, en ese contexto, la banca mediana está dispuesta a mantener el pulso por la guerra hipotecaria que algunas grandes entidades han abandonado al considerar que ya no es tan rentable. Aunque la falta de ‘stock’ dificultará que se pueda seguir creciendo a doble dígito, UCI anticipa un 2026 de récord en el que se firmarán 500.000 hipotecas. Hasta septiembre de este año se han registrado 399.000, según las estadísticas del INE.
«El incremento rondará el 5%, acompañado de una reactivación del crédito a promotores por parte de la banca», apuntan los expertos. En cuanto a los particulares, «ya hemos visto algunas grandes entidades ajustando al alza sus precios, así que prevemos que los bancos medianos serán los que lideren las mejores ofertas el próximo ejercicio», explica Laura Martínez, portavoz de iAhorro.com.
«Con los precios de la vivienda tan elevados, la única opción para las familias es ofrecer buenas hipotecas y los bancos tienen que mover ficha. La gran banca puede vivir sin crecer mucho en este segmento, pero la mediana es donde hace negocio. Por eso creemos que ahí se encontrarán los mejores préstamos», insiste la experta.
La clave en la evolución de precios estará, en todo caso, en la dirección que marque el euríbor. El consenso espera que el indicador se mantenga estable en la primera parte de 2026, con ligeras subidas que podrían llevarle a cotizar entre el 2% y el 2,3% en la primera mitad del año, tocando en algún momento del segundo semestre el 3% si la inflación repunta y los bancos centrales se ven obligados a girar su estrategia hacia la subida de tipos de interés.
Aunque esto implicaría cierto encarecimiento de los préstamos, los futuros propietarios aún podrán encontrar buenas oportunidades a costa, eso sí, de una mayor vinculación. Es decir, contratando otros productos (como seguros, fondos o incluso alarmas) para obtener un menor tipo de interés.
Todo depende, en este caso, del perfil del cliente: a menor riesgo para el banco, menor vinculación. «El perfil ideal para las entidades es el de una pareja con más de 3.000 euros entre los dos, contrato fijo indefinido y un 20% de los ahorros necesarios para pedir la hipoteca. Cuanto más se alejen de esos criterios, más requisitos impondrán las entidades», explican los expertos de iAhorro.com. «Los que lo tendrán más complicado serán los jóvenes, los solicitantes con bajos ingresos (incluso si piden la hipoteca en pareja) y los solicitantes con un perfil medio que quieran comprar una vivienda en una zona de altos precios», añade Miquel Riera, experto en hipotecas de HelpMyCash.com